Alianza residual y UCeDe sobreviviente

En campaña, Néstor Kirchner aludió despectivamente a “la Alianza residual”, refiriéndose a quienes hoy militan en la oposición liberal y antes fueron figuras importantes en la malhadada Alianza que llevó al colapso de 2001. Esto le permite al ex presidente del PJ ocultar un costado importante del gobierno: que está plagado, precisamente, de prominentes figuras de aquella coalición, comenzando por quien fuera su mentor y principal dirigente. No se puede coincidir con el ex presidente en que todos/as quienes integraron la Alianza son personas despreciables. Las hay muy valiosas, por cierto. Aunque abunden de las otras. Esa mezcla se da también entre quienes formaron y forman hoy parte del gobierno de la familia Kirchner.

He aquí algunos nombres, entre otros muchos, para que usted elija en qué columna pone a cada uno: Carlos Álvarez (titular del Mercosur); Nilda Garré (Ministra de Defensa); Graciela Ocaña (ex ministra de Salud); José Nun (ex Secretario de Cultura); Eduardo Sigal (Encargado de Comercio Internacional de la Cancillería); Luis D’Elía (operador sin cargo formal); Darío Alessandro (ex embajador en Cuba); Juan Pablo Cafiero (embajador en el Vaticano); Alicia Castro (embajadora en Venezuela); Arnaldo Bocco (director del Banco Central); Juan Manuel Abal Medina (h) (vicejefe de gabinete); Oscar González (funcionario de la jefatura de gabinete). Ahora bien: ¿qué decir de los sobrevivientes de la UCeDe? Hubo y hay muchos de ellos en el gobierno. Y no es casualidad que para reemplazar a Alberto Fernández, un hombre de Domingo Cavallo, jefe de gabinete durante cinco años, eligieran primero a Sergio Massa y ahora a Amado Boudou, ambos amamantados en esa cantera de cuadros reaccionarios. ¿Desde dónde lanza entonces Kirchner su condena?