Primer Coloquio Latinoamericano de Pensamiento y Praxis Feminista

En un intento por construir puentes entre la teoría y la práctica, el instituto interdisciplinario de género de la Universidad Nacional de Buenos Aires junto al GLEFAS (Grupo Latinoamericano de Estudios, Formación y Acción Feministas) organizaron el Primer Coloquio latinoamericano de pensamiento y praxis feminista, llevado a cabo desde el 24 al 27 de julio en el Museo Roca.

Durante la primera jornada se realizó una exposición de los feminismos en Argentina y su relación con la academia. En este marco, las voces autorizadas de las “madres” del feminismo de los 70, recordaron su paso por la militancia y aplaudieron la producción intelectual que realizan las nuevas generaciones dentro y fuera del movimiento. En base a esta primer propuesta se trabajaron dos ejes fundamentales: Pensar la práctica, hacer lo soñado y por otro lado pasión y política

Entre las participantes argentinas se encontraban Valeria Flores, Post fugitiva del desierto agrupación lesbica de Neuquén, quien realizó una exposición crítica acerca del feminismo desde los márgenes y su lugar de cimarronaje. Claudia Korol de Pañuelos en Rebeldía, recordó la masacre de Avellaneda el mismo viernes 26 y dejó entrever la necesidad de que la militancia feminista deje de entenderse escindidamente de las luchas sociales, sino como parte de la transformación colectiva. Un último debate, que quedó inconcluso, fue abierto por Lohana Berkins de ALITT, acerca del ingreso de las trans en los encuentros de feministas y la negativa que sostienen algunos sectores, poniendo sobre el tapete la necesidad de rever que entiende el movimiento feminista sobre la categoría de mujer y mujeres.
Algunas compañeras del exterior trajeron ricas experiencias, como el caso de Julieta Paredes, que asombró a muchas de las participantes en la exposición del feminismo comunitario que proponen Mujeres Creando Comunidad en Bolivia. Este es un proyecto que lleva más de 10 años en acción y que pretende una transformación colectiva de los medios actuales a partir de entender a las mujeres como partícipes activas de todos los procesos por ser la mitad del todo, desde la población hasta la fuerza de trabajo.
La propuesta inicial del Coloquio fue buscar un diálogo constructivo entre quienes hacen feminismo callejero y territorial, y quienes teorizan; sin embargo se evidenció que categorías como “género” siguen lejos de entender y captar la complejidad de las mujeres latinoamericanas que comparten los medios precarios de supervivencia, la violencia doméstica que denuncian a diario, la disidencia a la heterosexualidad y el racismo que se sufre incluso dentro del movimiento de mujeres.
Igualmente el espacio de reunión sirvió para que las activistas presentes pudieran denunciar el racismo de la organización que avaló al museo Roca como espacio de reunión, olvidando uno de los primeros genocidios nacionales de los que fue artífice el ex presidente.

Por Canela Gavrila
>