La primera junta argentina el día 28 de mayo de 1810 hace conocer al pueblo las primeras medidas de gobierno, y una de ellas es que deberá atender las necesidades de la población indígena. Sin embargo, hasta el día de hoy, el Estado argentino ha desconocido a sus verdaderos patriotas fundadores de la nación y ha aceptado como válida una Constitución Nacional hecha por la oligarquía terrateniente. Esta Constitución ha posibilitado una dependencia permanente de los gobiernos extranjeros, la entrega del país, la matanza de hermanos, la disociación del pueblo, el empobrecimiento, la pérdida de la soberanía, la destrucción de nuestro recursos naturales y la concentración económica en pocas manos.
Estos grupos económicos oligárquicos siempre manejaron nuestro país, utilizando su poder de presión o por la fuerza aliándose con sectores militares golpistas. Esto ha hecho que en nuestro país no se haya podido implementar una política integracionista basada en nuestra composición étnica y pluricultural. Es por esto que los Pueblos Originarios siguen esperando que se cumplan los mandatos de la primera junta de gobierno patrio. Desde 1994 tenemos el reconocimiento constitucional de preexistencia como pueblo, pero todavía el gobierno nacional no ha creado un ministerio de asuntos indígenas y ya al comienzo del tercer milenio seguimos esperando que la clase dirigente argentina despierte y se den cuenta que durante cientos de años han sido idiotas útiles de este sistema liberal capitalista ya acabado, pues sólo ha servido para alimentar guerras, hambrear pueblos y destruir el medio ambiente.
Los Pueblos Originarios proponemos un nuevo país plurinacional y pluricultural, una nueva democracia real y participativa que sea capaz de crear un proyecto de desarrollo nacional estratégico basado en la ciencia y en la tecnología y la conservación de medio ambiente.
9 de abril de 2010
Pueblo originario Mapuche – Tehuelche del Chubut
Jorge Pilquimán - Pulki manke (cóndor guía)
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